✍️ Rutinas de escritura para guionistas – con Irlanda Tambascio #3

 

Esta entrevista forma parte de la serie “Rutinas de escritura para guionistas”, en la que entrevistaré a distintos guionistas con preguntas sobre cómo es su proceso creativo, de dónde obtienen inspiración para sus historias, qué les funciona y qué no, entre otras muchas cosas. Aquí, la tercera de ellas, con Irlanda Tambascio, que ha trabajado en diversos formatos y soportes (novela gráfica, cómic, etc.); historias a las que ha dado forma desde su experiencia como montadora.

Irlanda Tambascio y su gato Figaro

Irlanda Tambascio y su gato Figaro

Biografía:

IRLANDA TAMBASCIO WAINE (Eire) es una directora, montadora y autora de cómics nacida en Caracas, Venezuela, en 1977 y nacionalizada española. Tras licenciarse en la carrera de Imagen y Sonido de la Universidad Complutense, empezó a trabajar como montadora y desde entonces ha editado más de 300 trabajos audiovisuales, desde series, realities de máxima audiencia, videoclips, cortometrajes con gran recorrido en festivales o documentales como “Piratas y Libélulas”(mención de honor en La Seminci, de Valladolid)-; “La cabeza de José” -dirigido por Alicia Luna-; o “Yo decido. El Tren de la Libertad”, junto con Teresa Font -seleccionado en el 62 Festival Internacional de cine de San Sebastián-.Como directora, se estrena en 2007 con su cortometraje “Esencia”, escrito por ella y en el 2009 dirige un Making of  sobre la ópera barroca “La Parténope” para el Ministerio de Cultura. En el 2011 rueda su segundo corto“El Regalo”, producido, escrito y dirigido por ella y que fue alabado por Javier Fesser.

Recibe el 10º Premio Proyecto Corto Canal Plus + Festival Internacional de Cine Cinema Jove por “Atocha 70”. Este trabajo recibió más de una decena de premios en festivales nacionales e internacionales, entre ellos el primer premio del público en Corto España 2013. En 2019, dirige el cortometraje “Iguales”, nominado al premio Acerca de cine en el Notodofilmfest y finalista en el I Festival MICRO. Ese mismo año, su proyecto de ficción “Rara(s) Avis”, es seleccionado  en la Residencia Coofilm.En 2020, estrena el videoclip “Mike Hunt” de la banda Patio Rosemary, reseñado por LOS40. Como autora de cómics debutó con “Aves Metropolitanas”, un bestiario sobre el metro de Madrid (Ed. Alianza); luego vino“Adelaida & Coco” (Ed. Grijalbo), una novela gráfica sobre el día a día de una joven urbanita y su gato, obtuvo una gran repercusión en medios y fue recomendado por la crítica (PlayGround, The Huffington Post y Forges, entre otros).  Su tercer libro es un trabajo colectivo co-escrito y co-ilustrado junto a mujeres refugiadas sirias en El Líbano, llamado “Las Mujeres de Aaramoun”(ONG Urdaspain). Su prólogo fue escrito por la madrina del proyecto, Rosa Montero, quien calificó este libro como “un milagro”. Su cuarto libro: “Gatos Repudiados (un gatálogo de almas felinas)”, será publicado por Alianza Editorial en el 2020. Es además, socia de CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales) y parte del equipo de CIMA en CORTO, una muestra de cine mensual que proyecta trabajos audiovisuales hechos por mujeres y que actualmente se programa en la Cineteca del Matadero de Madrid.  

¿Qué tipo de historias sueles escribir?

Escribo mucho, pero no siempre como guionista. No me considero una guionista con muchísima experiencia, ya que no soy guionista de profesión. Como profesional, busco abarcar más cosas. Escribo porque me gusta, es una manera muy directa de comunicar por mi necesidad de comunicación y de expresión. A lo largo de años de profesión he escrito en diferentes formatos: guiones de cortometrajes, cómics, novela gráfica, etc. 

Me ha llamado la atención lo que has comentado de novela gráfica. No es una comunicación audiovisual, pero sí visual. ¿Cómo abordas la escritura en los diferentes formatos y en concreto en novela gráfica?

Yo creo que son formatos muy diferentes. Se parece al cine en que es narrar con imágenes, y es secuencial, pero a la vez el proceso es distinto. Mi principal formación desde que comencé a trabajar con 18 años fue el montaje, lo cual es una herramienta que luego me ha servido a la hora de escribir novela gráfica. Como ya tenía bastante experiencia como montadora audiovisual me salía como muy natural el ritmo, la estructura, etc. 

Con una novela gráfica sigo el siguiente proceso: primero, me surge una idea, que puede ser un tema y una premisa. Así, a nivel conceptual muy básico, visualizo en mi cabeza el tipo de libo que quiero hacer. Por ejemplo defino: “ una novela gráfica, narrativa, con cierta extensión, que se constituya de anécdotas”, etc. Ello lo decido bastante rápido. No sé de dónde vienen esas decisiones, tal vez del tipo de libro que me gusta o de lo que observo de otras obras. Así voy definiendo qué quiero introducir. 

Irlanda Tambascio con su libro Adelaida y Coco

Irlanda Tambascio con su libro Adelaida y Coco

Una vez que tengo las cosas más básicas en la cabeza empiezo a estructurar y a realizar bocetos de las viñetas. En paralelo voy creando situaciones y bocetando, tanto en word definiendo los textos como dibujando, rellenando el molde de la estructura. Surge de una forma muy orgánica y muy intuitiva, creando un orden. Una vez eso está, ya empiezo a dibujar bocetos más definidos, con los bocadillos y diálogos. Así voy concretando y afinando. Me sirve realizo una maqueta del cómic e imprimirla, de tal forma que tengo un pequeño librito. Creo que es muy importante tener tu libro físicamente, porque al pasar las páginas tú ves si funciona o no. 

Cuando envié esta maqueta a la editorial, no me pidieron cambios, les gustó tal cual, pero sí me pidieron que fuera un poco más narrativo. Esto me costó bastante. Tuve que añadir, a algo que ya funcionara bien, un hilo conductor. Lo hice con tramas paralelas para mostrar un paso del tiempo más claro. Cada página del libro es un gag, o una broma. Esto le añadió cierta continuidad a posteriori. 

Eso es algo que les pasa mucho a los guionistas: tienes tu guión “cerrado” y llega un inversor y nos pide cambios. ¿Cómo gestionaste este cambio cuando tu historia ya vivía por sí misma?

Para empezar, como fue lo único que me pidieron, lo acepté. Me costó mucho pero mi experiencia como montadora me ayudó. Otra cosa que me ayudó fue que mientras realizaba mi proyecto, me iban pasando cosas en mi vida, problemas, mi gato se puso enfermo, etc. A priori mi motivación por hacer este libro es porque quería reírme un poco de mí misma. En este proceso de cambios quise encontrarle un significado más profundo. Como mi gato se puso malito y yo lo pasé muy mal, fui profundizando más en mi relación con mi gato. No era casual que yo hubiera decidido contar esa historia de mi gato. Me fui dando cuenta de cosas que me pasaban con mi gato por los dibujos. Le encontré este significado. Aproveché eso para añadir los cambios en este sentido, dándoles una justificación desde una perspectiva emocional y un significado. Este libro mejoró clarísimamente mi relación con mi gato. 

¿De dónde vienen tus ideas? 

Creo que soy una persona que tiene muchas ideas, constantemente. Suelo tener tres o cuatro ideas que quiero hacer, pero algunas se quedan en el camino. 

No sé de dónde vienen mis ideas. Algunas me han surgido después de un gripazo, por ejemplo, de algún momento un poco raro, de estar en cama y estar un poco rallada, o cuando no estoy a gusto. De este bloqueo o sensación más negativa que me puede provocar algo, surge una idea, como una necesidad. Algunas surgen de ahí. Otras de forma espontánea. De repente aparecen. Cómo me decido a veces por una y no por otra es dándoles un poco de tiempo. Una idea te puede parecer buena pero le puedes encontrar alguna pega o no ser el momento para desarrollarla. Por ejemplo, la idea del cómic del gato se me ocurrió antes de hacer mi primer libro (Aves Metropolitanas). Cuando encontré el momento propicio empezó a madurar y madurar. 

A veces también hay momentos personales muy convulsos que me influyen. Pero eso también es peligroso si está demasiado unido a tu biografía, si te suceden muchas cosas. 

¿Cómo ser montadora ha influido a la hora de concebir una historia?

Yo creo que influye porque tengo muy interiorizado narrar e hilar una historia de principio a fin haciendo que las piezas encajen, ordenando el desorden, y creando conexiones y generando que el material emotivo tenga un sentir y fluya. Tener esto muy interiorizado también tiene que ver con cómo soy yo: cómo veo la vida, cómo le encuentro explicación, darle una narrativa a las cosas que digo, y un sentido y un aprendizaje. Ello lo implemento en cualquier cosa que haga. 

¿Qué es lo que más te cuesta de escribir?

En guión escribir mis primeros dos cortometrajes me costó mucho. Me fascina la narrativa fílmica pero el formato de guión me cuesta porque es muy técnico y tiene unas reglas. Lo hago porque lo tengo que hacer y hay partes del proceso que me gustan mucho, como imaginar todo ese mundo desde cero, pero me parece arduo. Creo que escribir un buen guión es algo muy difícil y de lo que soy muy consciente, con lo cual mi grado de exigencia es alto. 

¿Escribes individualmente o en colectivo y qué consideras más productivo para ti?

En las historias de cómic hacerlo yo me va muy bien, y también en los cortos. En el guión, sobre todo en el formato largo, me viene bien escribir con gente. Creo que así tienes otro punto de vista que te aporta, que lo ve con objetividad, etc. 

**¿Aún no has leído la entrevista al guionista de serie diaria y creador de Servir y Proteger Tirso Calero? Haz click aquí**

A nivel práctico, cuando te pones a escribir ¿tienes alguna rutina o ritual o improvisas como te pille?

Escribo mucho, aunque sean cosas sin ningún propósito concreto. Se me ocurren muchas historias y tengo mucho material. A veces escribo de forma totalmente intuitiva, para plasmar lo que siento y mis pensamientos. Son documentos que acumulo y que luego reviso. Entonces, cuando me decido con una de las ideas para materializarla, suelo ir a la biblioteca. La biblioteca de al lado de mi casa tiene una luz maravillosa y es un buen ambiente. A veces intento desayunar muy bien para no tener que parar a comer, y puedo llegar a estar bastantes horas. Cuando me pongo a escribir guión es mucho más lo que escribo que lo que luego sale. Con los comics en general voy rápido, no me bloqueo con el proceso, pero en el guión hay que meditar más. Aunque con la última cosa que estoy escribiendo me va fluyendo bastante. 

¿En qué estás trabajando ahora?

Tuve un bloqueo grande con una historia de un largometraje y decidí hacer otra, que no estuviera tan pegado a mi biografía. Fue ahí de forma muy rápida me desbloqueé. Estaba muy empeñada en hacer un tipo de película, y cuando lo solté, surgió otra historia que no era el tipo de película que yo esperaba de mí pero que me gustaba y que fluía. Se me ocurrió hace un año y a día de hoy está casi escrito el guión. Este estoy escribiéndolo en conjunto con más personas.